Han pasado unos diez días desde que Ibercaja Banco convocó a las secciones sindicales para comunicar la intención de presentar un ERE, por causas económicas, técnicas, productivas y organizativas, al amparo de los artículos 40, 41 y 51 del Estatuto de los Trabajadores, ya que incluye despido colectivo, modificación sustancial de las condiciones de trabajo, y movilidad geográfica.
La negociación en su período formal, comenzará en los primeros días de abril, y durará 30 días como máximo desde la primera reunión. Antes de esa fecha deberíamos tener una propuesta de acuerdo por parte de la empresa, para que durante el período formal de consultas, se presentaran por parte de las secciones sindicales diferentes modificaciones a la propuesta empresarial, con el fin de alcanzar un acuerdo definitivo.
Lo que sabemos a día de hoy, es la intención de reducir la plantilla en 686 personas, que suponen casi el 13% del total de la plantilla de Ibercaja Banco, y cerrar unas 160 oficinas. Si bien creo que el número es desorbitado, suele ser una tónica habitual de las patronales, y de sus asesores en las mesas de negociación, comenzar con una cifra que se aleja mucho de la realidad final, para terminar pareciendo que incluso te están haciendo un favor. Entiendo que los 686, serán muchos menos, aún así, la situación es preocupante, máxime si la distribución no es proporcional por los diferentes territorios.
La fórmula de salida que se aplique es también una cuestión muy importante, pues supone que en función de la voluntariedad, sean más o menos traumáticas. Faltan por descubrir por tanto, varios enigmas:
- Se primará la voluntariedad? Aún teniendo en cuenta, que se incluirá movilidad geográfica en la negociación. A mayor voluntariedad, mayor facilidad en el reajuste.
- Se apostará por incentivar las salidas de los empleados de mayor edad? Con unas condiciones más ventajosas? También este hecho facilita la voluntariedad enormemente, ya que los salientes voluntarios dejarían huecos para los que se quedan, sin necesidad de traslados traumáticos, a grandes distancias.
- Será proporcional la reducción del excedente en todos los territorios? Importantísimo, sobre todo para una comunidad como la extremeña, que vio como en el ERE de 2015, los traslados a larga distancia se cebaban especialmente con nuestra Territorial.
- Por último, si como parece que será, el ajuste tiene un período de aplicación de dos años, hasta el 31 de diciembre de 2018, será utilizado por los superiores jerárquicos como amenaza permanente a los compañeros de las oficinas? Dificultaría muy mucho la productividad, en contra de lo que los sujetos amenazantes puedan pensar.
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